Javier Yebes tomó la palabra para anunciar que será la sala de exposiciones, una vez reformada, la dependencia que llevará próximamente el nombre de Pablo Lau. Yebes continuó su intervención afirmando que “esta actuación viene a continuar la línea de reconocimientos de justicia a artistas y personas ilustres de Sant Joan que han trabajado por el fomento de la cultura en el municipio”. Por su parte, Manuel Aracil quiso hacer un agradecimiento expreso al artista por su generosa donación ya que no todos optan por la donación y eso es de agradecer, lamentando que “lo triste es no haber podido hacerlo en presencia de Pablo”.
Fue José Francisco Martínez Beneíto, amigo íntimo de la familia Lau, quien actuó como portavoz del artista para hacer lectura de un comunicado en el que Pablo aseguraba no haber podido acompañar “en este acto de amor en el que no hay compromiso entre las partes, ni obligación alguna: sólo amor. Amor en la entrega y amor en la recepción de esta donación”. Las palabras de Pablo continuaban diciendo: “Amigos, os dejo mis colores. Aquellos a los que me entregué, con ímpetu acalorado a veces, con entusiasmo y placer siempre. Pero, como en el lienzo, hay que saber poner la última pincelada y dar por concluido el cuadro”.