Juan Conejero demostró en su pregón su amplio conocimiento de la Semana Santa de Sant Joan. Recorrió, acto a acto, todo el programa que la Junta de Cofradías desarrolla durante el año, desde las procesiones y la convivencia cofrade, hasta las celebraciones litúrgicas o el belén parroquial. Y a su vez relacionó cada uno de estos actos con los momentos esenciales de la vida de todo cristiano. Además, de una manera especial, incidió en los actos de carácter solidario, a beneficio de los más necesitados, donde la Junta se implica continuamente. El pregón finalizó con toda la Iglesia en pie, aplaudiendo las emotivas y entusiastas palabras de Juan Conejero.
Pero la emotividad de la tarde comenzó antes, con la Misa Mayor de la Junta, presidida por el propio Juan Conejero y co-oficiada por el párroco Manuel Martínez Miravete, una misa dedicada a Carmelo Dávila. Todos los intervinientes hablaron de Carmelo, y en concreto, se lanzaron dos propuestas en firme para recordar su memoria. El presidente de la Junta Mayor de Cofradías, José Manuel Caturla, solicitó que el futuro Museo de la Semana Santa de Sant Joan lleve por nombre ‘Museo de Semana Santa D. Carmelo Dávila Martínez’. Por su parte, el alcalde de Sant Joan, Manuel Aracil, anunció que el Ayuntamiento va a abrir expediente para dedicar una calle al que fuera párroco de Sant Joan durante 14 años. Ambas propuestas fueron muy bien acogidas por el público presente.
Entre los asistentes cabe destacar la presencia de autoridades locales, representantes de diversas entidades sociales, culturales y religiosas, las Reinas de las Fiestas del Cristo de la Paz, las Bellezas de la Hoguera Maisonnave y la Reinas, Damas y directivos del Casal de la Tercera Edad. También acudieron representantes de la Hermandad de San Agatángelo Mártir, patrón de Elche (de cuya Parroquia es titular Juan Conejero) y de la Cofradía del Santo Entierro de El Campello. El cierre del acto vino de la mano de la Agrupación Coral de Benidorm, dirigida por Luis Seguí. Esta formación ofreció un pequeño repertorio de música sacra de mucha calidad, con obras de Mozart, Goldsmith, Kedrov, Julio Domínguez o John Willians. Sus voces sonaron de forma espectacular dentro del templo parroquial.