Se han eliminado, del socavón que existía a la entrada de Benimagrell, los restos acumuldos por las aguas pluviales para rellenarlo con un masa de tierra, piedra y cemento que, por capas, se ha ido compactando. Después, se ha asfaltado y próximamente se restablecerá el tráfico con normalidad. Se trata de una zanja de unos 30metros de largo por 1'5 metros de ancho que se ha saneado tras el deterioro causado por las filtraciones de agua y el paso de vehículos "a lo que se ha querido poner solución de forma inmediata", afirmó el concejal.