La
jornada lectiva comprende de esta forma un máximo de cinco periodos
diarios, que se desarrollan por la mañana, incluyendo los
correspondientes descansos para el alumnado. Además los centros
siguen ofertando el servicio de comedor y transporte escolar, al
mismo tiempo que garantiza la permanencia del alumnado en sus
instalaciones en la misma franja que en el horario partido. Y es que
los escolares que lo solicitan participan en las actividades
extraescolares complementarias, con carácter
gratuito y voluntario para las familias.
Tras este logro de
las AMPAS, las direcciones de los centros y todo el personal del área
de Educación, dirigida por el edil Javier Yebes, Sant Joan d'Alacant
se convirtió en la primera localidad que consigue la jornada
continua para todos sus centros públicos. Una acción que ahora se
pone en evaluación para hacer balance del efecto en el alumnado.
Así las cosas, con los tres informes realizados, uno en cada centro escolar, destaca que la nota media de los estudiantes ha experimentado un ligero ascenso de un 1% al tiempo que se ha reducido el número de incidencias en horario de comedor. Y es que el número de niños que se queda en el servicio de comedor ha bajado un 13% por lo que se destaca en los informes que, al haber menos niños, hay menos conflictos y no se pierde tiempo lectivo solucionando problemas.
“El trabajo de coordinación de los maestros es más satisfactorio pues se aglutina en una tarde todas las tareas de equipo”, asegura Yebes. “Las familias están muy contentas porque los niños tienen las tardes más organizadas, con una mayor flexibilización del tiempo de estudio y de actividades extraescolares” añadió, basándose en datos y frases de los propios informes redactados por cada centro para enviarlos a Consellería.