El conductor del autobús, al intentar evitar la trapa que se encontraba levantada, ha tomado contacto con el terreno de tierra que limita la calzada provocando su caída. En el interior del autobús se encontraban cuatro pasajeros, que han podido salir por su propio pie, sin ningún tipo de lesión.
El autobús ha permanecido en las inmediaciones de la calzada durante cerca de tres horas, hasta que la grúa ha logrado incorporar el vehículo de nuevo a la vía.
El concejal de urbanismo, Manuel Gimenez, ha declarado esta mañana que “la inundación que se ha producido era totalmente previsible, y sí esta tarde volviera a llover, estoy seguro de que volveríamos a tener el mismo problema”. El edil ha explicado que “el problema se produce porque el colector de aguas fecales de la mancomunidad no tiene una conclusión en la estación de bombeo de la Condomina, en el término municipal de Alicante. Cuando llueve, se mezclan en el mismo colector el agua de lluvia que recoge el alcantarillado y las aguas fecales, sobrepasando la capacidad del colector, provocando que salten las trapas y que las aguas residuales vayan a parar a la calle y a los terrenos colindantes.
La solución a este problema parte tal y como indica Gimenez, parte de la responsabilidad de la mancomunidad, que “posee un proyecto que integra la construcción de un aliviadero entre la estación de bombeo de la Condomina y el barranco de la Juncaret. De esta manera, todas la aguas que no pueda bombear desde la estación actual, irían por este conducto hasta el barrando de la Juncaret”. El principal motivo por el que no se ha desarrollado este proyecto es que “el ayuntamiento de Alicante ha mostrado su oposición en numerosas ocasiones con razones que no son comprensibles, desde que el este documento se aprobara hace más de dos años”. Entre los argumentos presentados se encuentra que tiene previsto modificar el trazado de esa vía, lo que supondría tener que cambiar la obra de emplazamiento. Gimenez añadía que “desde esta administración nos parece que no es una razón, ya que estamos hablando de problemas muy serios, hablamos de problemas de contaminación de aguas fecales en una extensa parte de terreno. Con esta postura nos demuestran que no existe una voluntad por parte del Ayuntamiento de Alicante para subsanar esta deficiencia, ni tampoco de la mancomunidad por no presionar a dicho consistorio para llegar a acuerdo y resolver de una vez por todas el problema. He intentado poner en contacto con el presidente de la mancomunidad, Pedro Romero, para que convoque de manera urgente una reunión extraordinaria del consejo rector, para abordar definitivamente este problema, ya que este no es el único problema en la comarca que existe respecto a los conductos de aguas fecales”.