“Nuestro centro quiere dar respuesta a las principales necesidades de las personas con discapacidad severa así como a sus familias”, aseguraba Irene Koch. “Aquí tendrá gran importancia la dignidad de las personas, por lo que se priorizará en el aspecto humano y se implicará activamente a las familias y a la comunidad”, añadía Irene, acompañada por emocionados miembros de la entidad como sus patronas, Elena Guembe y Esther Rivera, o la trabajadora social Arancha Martínez. Un acto en el que también participaba el alcalde en funciones, Víctor García Berenguer, y otros ediles del equipo de gobierno como Arantxa Maldonado y Charo Tomás.
El proyecto prevé la construcción de una vivienda tutelada asistida en la que 7 personas podrán tener su hogar en compañía de sus familias. Una zona de residencia permanente, una sala de tratamientos con piscina terapéutica y un jardín de estimulación sensorial son las tres áreas más destacadas de estas instalaciones. Este centro se desarrollará utilizando materiales para el aislamiento acústico, eliminando barreras arquitectónicas y añadiendo sistemas de grúas de techo que crearán un espacio totalmente adaptado a las necesidades de los usuarios.
En la imagen, Lucas Koch sostiene en sus piernas el documento de licencia de obras, rodeado por autoridades y miembros de la fundación. Al fondo, el hospital de Sant Joan d'Alacant.